El bebé maravilla se ha transformado en el bebé peligroso.
La inparable curiosidad lo convierte en una amenaza terrorista dentro de la casa.
Ya nada queda indemne. Todos los movimentos deben ser controlados y los objetos, vigilados.
Los enchufes, el ventilador, el teléfono, la cocina, la cámara fotográfica, los controles remotos, las llaves, la computadora, la heladera, el televisor, los cables de cualquier tipo y todo lo que conduzca electricidad lo atrae misteriosamente.
La familia viene intentando implementar un sistema de prohibiciones, pero esto no es tan fácil de llevar a la práctica pues Geovani todavía no asimila definitivamente el concepto de No.
Aqui en la foto vemos como Geovani intenta a toda costa prender la luz de la sala, haciendo gala de toda la cabellera rubia que envuelve su macrocefálica testa. Todo un canto (eléctrico) a la vida.
1 comentario:
Essa foto ficou muito engraçada.
Pelo ângulo parece um menininho magrinho com uma cabeça enorme!
Gostei!
Beijos da tia-dinda
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